Lo bueno de escribir es que siempre sale la emoción. Lo malo de escribir es que no le llega a quien quieres porque el mail está en desuso y las cartas murieron en mensajes de audio de WhatsApp que nadie escucha pero oye. Durante 30 años he levantado la voz y hacerlo desde este cuerpo, de mujer (que parece que se sabe defender) es cansadísimo. Para decir que no compartes conmigo el pensamiento me dices que exagero y para explicarme tus actos denostas los míos. Si levanto la voz y digo lo que otras aun no pueden “estoy muy enojada” pero si no lo hago me quiero empastillar con dos cajas de actron. Me dices que me crees, que me acompañas y que me ayudas a cuidarnos en equipo, pero si te digo cómo aliarnos te sientes insultado por las medidas que te pido. Yo hablo aquí de lo mucho que me incomoda estar en un mundo con ellOs para poder regresar al mundo de todAs lAs personAs. Pero cuando estoy escuchando qué hay que decir lo que no hay que callar, hablo de hechos tangibles y tú me contes
La voz en off decía que "quien tiene una abuela tiene un tesoro". Más que un tesoro, tiene la lumbre de las almas. No sé qué pasa con la relación entre personas ancianas y pequeñas, tal vez que ambas están tan cerca de la muerte que se encuentran con los corazones más unidos. Mientras veía la cara de Herminia y escuchaba como se despedía de sus nietos, pude sentir las manos de mi abue Cris acariciando mis manos. Así, en silencio, como a veces veíamos la tele juntas. También estaba mi abue Lulú, ella sí que se me figuraba en la actriz, tan blanca, con sus hilos color de plata. En los últimos meses las extraño más, es que tal vez me estoy convirtiendo en la mujer que ellas veían en mí, lo que podía ser. Espero que sí. Lo que sé es que vivo las cosas que ambas habrían deseado. Fui a la escuela a aprender, mucho, no por un titulo, sino por saber. Con eso honré a mi abue Lulú. A ella que no la dejaron estudiar mucho me supo confiar nuestro secreto: "vive como tú quieras, t